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Dentro de la casa

Vistas en el interior

Planta baja

La planta baja presenta, en la entrada, elementos de mobiliario tradicional así como un pavimento muy original. Es el lugar que permite descubrir cómo se transformó el antiguo espacio de la entrada en la sede de la justicia y la impresionante sala del Tribunal de Corts o tribunal penal.

Primer piso

Al subir al primer piso, se entra en la sala noble, llamada de los pasos perdidos. Las pinturas murales ubicadas en este espacio son originales de finales del siglo XVI, representan el ciclo de la pasión de Cristo. Anteriormente se encontraban en la sala contigua.

En el lado norte del primer piso está la cocina, con una auténtica y sorprendente chimenea, que nos permite hacernos una idea no sólo de la gastronomía de la época sino también de cómo se organizaban las jornadas políticas en los siglos XVIII y XIX y del porqué de la indumentaria tradicional.

La sala de sesiones es el punto neurálgico del edificio en el cual converge la presencia de la voluntad centenaria de la identidad andorrana. En los textos más antiguos se explica que las sesiones del Consell se iniciaban a toque de campana, que se encuentra en esta sala, conservada tras la reforma del 1962. En esa misma fecha se construyó el hemiciclo, presidido por el Síndic general (presidente) y el Subsíndic general (vicepresidente). Los retratos de los copríncipes, el obispo de Urgell y el presidente de la República Francesa, ocupan un lugar bien visible en la sala.

A lo largo de más de dos siglos y medio, esta sala tuvo también las funciones de archivo y de capilla. El armario de las Set Claus (Siete Llaves), uno de los símbolos del Consell General, es un testimonio de ello. En el extremo opuesto a la presidencia del Consell está la capilla, que no se utiliza en la actualidad.

En esta misma planta se encuentra el despacho oficial del presidente, que no se incluye en el recorrido de la visita, donde se reciben a las visitas protocolarias. Esta sala, entre otras funciones, había sido aula de escuela para alumnos de la parroquia de Andorra la Vella.

Segundo piso

El segundo piso, el altillo de la casa, es un espacio polivalente. De su antiguo uso como buhardilla, pasó a ser dormitorio para los parlamentarios, más adelante, el primer Museo postal y posteriormente sala de reuniones y de conferencias.